El “salko” o leche condensada, conocido por representar una infancia despreocupada y un gusto que a casi todos les encantaba. Lo uso no solo en mi café o como dulce, sino también para mejorar el estado de ánimo cuando ni siquiera el chocolate puede ayudar.
¡Prepárenlo ustedes mismos siguiendo nuestras instrucciones y no tendrán que preocuparse por no lograrlo!
Necesitarán:
200 ml de leche 200 g de azúcar en polvo 20 g de mantequilla Instrucciones:
Mezcla en una cacerola los tres ingredientes.
Coloca la cacerola a fuego lento y mezcla hasta que la mantequilla y el azúcar se disuelvan. Cuando la mezcla comience a burbujear, es una clara señal de que está empezando a hervir.
Aumenta el fuego, continúa cocinando y no dejes de mezclar. Si la mezcla comienza a burbujear demasiado, baja el fuego lentamente. Después de que la mezcla de leche hierva, déjala hervir exactamente durante 10 minutos más.
Retira la cacerola del fuego y colócala en agua fría. Esto asegurará que la leche condensada se enfríe y se espese.
Viértela en un recipiente adecuado para almacenar. Es importante que esté cerrado y guardado en un lugar seco en el refrigerador.
¡Les deseamos un delicioso disfrute!