Este pastelito se llama “Boules coco Marocaine” o “pastel Richbond” o incluso “Bolas de nieve” por su forma redondeada y el coco que le da un aspecto nevado. Tiene varios nombres graciosos, como Richbond, la marca de un fabricante de colchones, para recordar la suavidad y el fondant del pastel.
También se le llama “kifach tlakena” (cómo nos conocimos), el nombre de una famosa canción de Samira ben Said, nombre que recibe la versión en la que los dos pastelitos se pegan. También se le llama mchimicha, recordando el sabor de la mermelada de albaricoque que se utiliza para empapar estos deliciosos pasteles.
Un pastel de mi infancia, atemporal, inolvidable. Me encanta especialmente que se derriten en la boca y la dulzura de la mermelada de fresa. Un pequeño horno aunque muy simple es muy famoso por décadas.
Ingredientes
- Para muchos bizcochos Richbond (unos 80) necesitarás:
- 200 g de coco rallado
- 1 taza de azúcar glas, 1 taza de aceite
- 1 sobre de levadura química, 1 sobre de azúcar vainillado
- 3 huevos
- 250 g de mermelada de albaricoque o fresa
Preparación
- Calentar el horno a 175º th7.
- En un bol grande, romper los huevos y luego añadir el azúcar, la levadura en polvo, el azúcar de vainilla y el aceite.
- Mezclar bien todos los ingredientes.
- A continuación, añadir la harina poco a poco, removiendo hasta obtener una masa suave pero bastante compacta.
- Luego divide esta masa en tantas bolitas como puedas, más o menos del tamaño de una nuez pequeña.
- Haz una bandeja de horno y luego pon las bolitas, separándolas bien.
- Hornear las bolas durante unos 20 minutos hasta que estén doradas y dejar enfriar.
- Calentar la mermelada hasta que esté líquida en un cazo o en el microondas.
- Vierte el coco rallado en un plato hondo o cuenco grande.
- Baña una magdalena, luego otra en la mermelada (que puedes aromatizar con un poco de agua de azahar), pégalas e inmediatamente pásalas por el coco. Haz lo mismo con el resto de las magdalenas.
- Nota: las tartas al salir del horno están duras… es normal. Sólo después de mojarlos en mermelada y coco, y esperar al día siguiente, podrás saborear el deshielo de estas pequeñas delicias.
Buena preparación.