Limpiar un horno puede ser una tarea desalentadora, sobre todo cuando se ha acumulado grasa quemada a lo largo del tiempo. Aquí tienes un consejo para limpiar el horno “sin esfuerzo”, incluida la eliminación de la grasa quemada:
Ingredientes y equipamiento :
- Bicarbonato de sodio
- Agua
- Un pulverizador
- Un paño o esponja
- Guantes de limpieza
Instrucciones :
- Preparación: Empiece por retirar las rejillas y bandejas de su horno, si es posible. Colócalas en un fregadero o bañera donde puedas limpiarlas por separado.
- Haz una pasta de bicarbonato de sodio: En un tazón, mezcla suficiente bicarbonato de sodio con agua para hacer una pasta espesa. Puedes empezar con aproximadamente 1/2 taza de bicarbonato de sodio e ir añadiendo agua poco a poco hasta conseguir la consistencia deseada.
- Aplica la pasta sobre las superficies sucias: Ponte guantes domésticos para proteger tus manos. A continuación, extienda generosamente la pasta de bicarbonato de sodio sobre las paredes del horno, especialmente las zonas en las que se haya incrustado grasa.
- Deja actuar: Deja actuar la pasta durante al menos 12 horas, o incluso toda la noche. El bicarbonato de sodio trabajará para ablandar y aflojar la grasa quemada.
- Limpia las rejillas y bandejas: Mientras la pasta está trabajando en el horno, limpia las rejillas y bandejas en el fregadero o bañera. Puedes fregarlas con bicarbonato sódico y una esponja o cepillo de fregar si es necesario.
- Limpie el horno: Después del tiempo de reposo, utilice un paño húmedo o una esponja para limpiar la pasta de bicarbonato de sodio del interior del horno. La grasa debería desprenderse fácilmente. También puede utilizar una espátula de plástico para raspar suavemente las zonas más rebeldes.
- Aclarar y secar: Una vez que hayas eliminado la pasta y la grasa disuelta, aclara bien el horno con un paño limpio y húmedo para eliminar cualquier resto de bicarbonato de sodio. A continuación, seca cuidadosamente el interior del horno con un paño seco.
- Cambiar las rejillas y bandejas: Cuando el horno esté limpio y seco, vuelva a colocar las rejillas y bandejas.
Con este método, la limpieza del horno será más fácil y eficaz. Utiliza ingredientes domésticos comunes y no requiere el uso de productos químicos agresivos. Sin embargo, asegúrese de que su cocina está bien ventilada durante el proceso, ya que el bicarbonato de sodio puede producir polvo cuando se limpia.