El malvavisco es una planta perenne que pertenece a la familia de las malváceas.
Por lo general, se cultiva como una planta bianual.
La mayoría de sus variedades provienen del este del Mediterráneo, aunque también se encuentran algunas que provienen de Turquía.
Gracias al portal deccoria, en este artículo aprenderás cómo cultivar esta planta y cuáles son sus efectos medicinales.
El malvavisco puede crecer hasta los 3 metros de altura, pero algunas pueden alcanzar hasta 7 metros.
Los tallos son rectos y no ramificados.
Florece desde junio hasta la primera helada en octubre.
Dependiendo de la variedad, las flores pueden tener diferentes colores: desde blanco, pasando por amarillo, naranja, rojo, rosa, hasta negro.
Cultivo de malvavisco
El cultivo del malvavisco es, en esencia, una tarea fácil.
Suelo El suelo para el malvavisco debe ser fértil, con humus y bien drenado.
Lo mejor es que tenga una reacción ligeramente ácida o neutra y un pH entre 6 y 7.
Ubicación
La ubicación del malvavisco debería ser soleada, ya que es donde florece mejor.
También se puede plantar a la sombra, pero se debe esperar menos cantidad de flores.
El lugar para la planta debe estar protegido del viento fuerte, ya que estos factores atmosféricos podrían provocar que los tallos del malvavisco se rompan.
Riego
Si se trata de plantas jóvenes, riega regularmente el malvavisco.
Las plántulas más viejas solo deben regarse cuando el suelo esté seco.
Las flores no toleran el exceso de agua, así que asegúrate de que el suelo esté húmedo pero no empapado.
Al regar el malvavisco, ten especial cuidado de no mojar sus hojas ni flores, ya que podrían desarrollar enfermedades por hongos. Riega cerca de la raíz.
Fertilización
El malvavisco se fertiliza de manera bastante ocasional.
Se realiza el tratamiento solo de 2 a 3 veces durante la temporada.
Las flores no tienen demandas especiales de nutrientes, por lo que un fertilizante mineral universal multicomponente debería ser suficiente.
Es posible fertilizar el malvavisco antes de plantarlo, solo mezclando el suelo con compost.
Estas flores prefieren los fertilizantes orgánicos, lo que ayudará a su mejor desarrollo.
Reproducción
El malvavisco se reproduce por siembra de semillas.
Esto se lleva a cabo desde finales de mayo hasta julio.
Cuando las plántulas tengan alrededor de 3 hojas, pueden ser trasplantadas.
Idealmente, deberían estar separadas por 25 cm.
En septiembre, transplanta el malvavisco a lugares permanentes cada 50 cm.
Las semillas del malvavisco para reproducción se recolectan en el segundo año después de la plantación.
Floración
El malvavisco florece desde junio hasta octubre.
Después de la floración, la planta puede dejarse en el suelo.
Florecerá en las siguientes temporadas, aunque cada año será un poco más débil.
Se recomienda dejarlas en un ciclo bianual, ya que en el segundo año después de la plantación florecerán más.
Invernada
El malvavisco puede pasar el invierno en el suelo.
No es necesario cubrir la planta.
Sin embargo, las plántulas jóvenes pueden ser más sensibles a las bajas temperaturas, por lo que podrían cubrirse con tela no tejida o hojas secas.
Enfermedades y plagas del malvavisco
Una de las enfermedades más comunes es el óxido del malvavisco.
Esto está causado por hongos.
Se manifiesta con pequeñas manchas amarillas que aparecen en las hojas y tallos.
Con el tiempo, estas manchas comienzan a agrandarse y se vuelven marrones.
Luego, las hojas del malvavisco comienzan a morir.
Es difícil eliminar esta enfermedad, pero no imposible.
El primer paso después de diagnosticar la enfermedad es quitar las hojas afectadas.
Luego, se debe rociar toda la planta con un fungicida.
El tratamiento se repite aproximadamente cada dos semanas.
¿Cómo usar las flores de malvavisco?
Las flores de malvavisco tienen muchas propiedades medicinales.
Por esta razón, se pueden usar para hacer té.
Simplemente vierte las flores con una taza de agua hirviendo.
Deja que repose durante unos 20 minutos.
Luego, cuela la infusión y bébela una vez que se haya enfriado.
Además, ayudan en el tratamiento de infecciones respiratorias y tienen propiedades antiinflamatorias que pueden aliviar la hinchazón. Pueden ser utilizadas para hacer compresas: empapa una compresa en la infusión de flores de malvavisco y úsala para lavar la piel, las piernas hinchadas o la cara.