Pintar una habitación, renovar un mueble, crear una obra… A veces, ocupados con trabajos de pintura a veces tediosos, podemos olvidar cuidar nuestro equipo, lo que puede resultar en desperdicio y en ir y venir a la tienda de bricolaje para comprar herramientas nuevas. ¿Y si en lugar de olvidarlos, te ocupas de limpiarlos después de usarlos o de tratarlos si ya es demasiado tarde para salvar los pelos endurecidos del pincel y recuperar tu rodillo momificado por la pintura? Ya seas un manitas o un artista, podrías darle una segunda vida a estos productos secados por la falta de mantenimiento, los cuales pueden ser bastante costosos. Así es cómo devolver tus pinceles y rodillos inutilizables a su estado original, evitando que se deterioren y ahorrando dinero la próxima vez que necesites pintar.
Resumen
¿Cómo evitar que un pincel o un rodillo se sequen entre usos?
A veces, al ver que se acerca la hora de terminar el día y la noche cae, podemos posponer nuestros trabajos de pintura a pesar nuestro. Si sabemos que retomaremos el trabajo dentro de 24 horas (o máximo 48), podemos tomar precauciones para evitar que la pintura se seque. De esta forma, no es necesario limpiar el aplicador de inmediato; se puede retomar tranquilamente al día siguiente. Para reutilizar tu equipo, se recomienda envolverlo en una bolsa de plástico, film transparente o papel de aluminio. Si llevas guantes para pintar y el pincel es pequeño, puedes sujetarlo con la palma de la mano y girar el guante para cubrir las cerdas. Luego, asegura la protección con cinta adhesiva.
Para evitar que el rodillo se seque y endurezca, también se puede envolver en plástico o aluminio. Si el tamaño lo permite, incluso puedes colocarlo… dentro de un recipiente Pringles limpio. Además, ten en cuenta que la bandeja también puede envolverse para proteger la pintura. Así, al día siguiente solo tendrás que desempacar todo y ponerte manos a la obra sin perder tiempo, evitando que se endurezca y manteniendo la flexibilidad de las cerdas.
¿Cómo limpiar los pinceles para evitar que se endurezcan?
Si ya no los necesitas, aprovecha que la pintura aún está fresca en tus pinceles para realizar una limpieza sencilla. De esta manera, no será necesario frotar demasiado ni utilizar productos químicos potencialmente irritantes para eliminar la pintura seca. Sin embargo, el método de limpieza y el disolvente para diluir las manchas dependerán del tipo de pintura utilizada.
Limpieza de un pincel cubierto de pintura acrílica o pintura al agua
Remoja las cerdas del pincel en agua tibia. Luego, enjuaga bien y no dudes en usar jabón de Marsella o jabón para pintura para lavar las cerdas y eliminar los últimos rastros. Para esto, humedece las cerdas, pásalas suavemente por el pincel para tomar un poco de producto sin dañarlas y frótalo contra la palma de tu mano antes de enjuagar.
Limpieza de un pincel cubierto de pintura (o pintura al óleo)
Para este tipo de pintura, generalmente se utiliza aguarrás vertido en un recipiente grande y se deja reposar durante varias horas, incluso toda la noche, con la tapa o film plástico asegurado con una banda elástica. Luego, solo hay que enjuagar. Si prefieres evitar productos tóxicos, hay una alternativa al aguarrás: el sustituto ecológico del aguarrás. A base de cítricos, se usa de la misma manera que su homólogo.
Muy importante: para secar tu pincel, evita el secador de pelo u otras fuentes de calor que podrían dañar las cerdas y deformarlas. Opta por un secado colgando el pincel boca abajo o sobre una superficie plana y limpia.
¿Cómo recuperar los pinceles secos y endurecidos?
¿Olvidaste limpiar tus pinceles y la pintura está seca? Para salvar tu pincel endurecido, será necesario actuar nuevamente según el tipo de pintura. Antes de tratarlo, puedes raspar el exceso de pintura teniendo cuidado de no dañar las cerdas o el mango. Para empezar, puedes usar un cuchillo o una cuchara.
Agua jabonosa para un pincel poco sucio (solo pintura acrílica o al agua)
Mezcla agua caliente con jabón (lavavajillas líquido, Marsella, etc.). Deja el pincel en remojo durante unos quince minutos, frota, enjuaga bien y remodela las cerdas con cuidado.
Vinagre blanco para los pinceles endurecidos
Calienta vinagre blanco y deja remojar tus viejos pinceles usados durante unos treinta minutos (o más si es necesario, incluso toda la noche). Esto funcionará especialmente bien en cerdas de nailon, ¡verás cómo la pintura se desprende sin esfuerzo! Después, enjuaga con agua jabonosa y agua limpia cepillando y frotando las cerdas.
Acetona, último recurso para salvar un pincel endurecido
Este producto químico no huele muy bien y no es ideal para la salud, pero realmente puede ayudar si nada más ha funcionado. Solo tienes que dejar las cerdas en remojo hasta que la pintura se disuelva. Luego, retira los últimos restos con agua jabonosa y enjuaga bien con agua limpia.
Otras ideas para limpiar un pincel endurecido
Algunas personas sumergen su pincel en un baño de suavizante para la ropa durante unas horas. Después, solo hay que frotar y enjuagar con agua jabonosa y luego con agua limpia para eliminar cualquier rastro de suavizante y pintura. Esto eliminará la pintura y suavizará las cerdas. Además, algunos también usan aceite vegetal (especialmente aceite de oliva) para ablandar un pincel endurecido. Se requiere varias horas de remojo en el aceite antes de frotar para eliminar la suciedad coloreada, seguido de una limpieza con agua y jabón. Y, por supuesto, también es posible optar directamente por un decapante de pintura, pero esta solución es menos económica y ecológica, además de ser menos suave con las cerdas.
¿Cómo limpiar un rodillo de pintura?
El rodillo de pintura es una herramienta útil, pero hay que aprender a limpiarlo para poder volver a usarlo. De nuevo, para limpiar los rodillos sin dañarlos y de manera efectiva, será necesario usar los productos adecuados. Además, después del lavado, evita guardar un rodillo aún húmedo, ya que podría moharse.
Limpieza de un rodillo cubierto de pintura acrílica o pintura al agua
Sobre el bote de pintura, raspa el rodillo con una cuchara para eliminar (¡y recuperar!) la mayor cantidad de material. De esta manera, evitarás desperdiciar. Luego, quita el mango y sumerge el rodillo en una cubeta de agua caliente con jabón. Aquí se usan aproximadamente 3 cucharadas de jabón líquido de Marsella para la limpieza y se deja en remojo durante al menos una hora. Luego, puedes escurrir y enjuagar con agua tibia. Aquí puedes usar un chorro de agua a presión para un enjuague efectivo. Finalmente, deja secar completamente al aire.
Limpieza de un rodillo cubierto de pintura alquídica
En este caso, el agua jabonosa no será suficiente, o solo se usaría después del tratamiento, durante el enjuague, para terminar. Opta por dejarlo en remojo durante varias horas en aguarrás, su sustituto ecológico o vinagre blanco. Después, enjuaga bien y deja secar el tiempo necesario antes de guardarlo en tu garaje o taller.
Recuperar un rodillo endurecido por la pintura
Como con los pinceles, aquí también se puede recurrir a un baño de vinagre previamente calentado en una cacerola o microondas. Aquí, asegúrate de tener suficiente líquido para sumergir bien tu material. Luego, vierte este líquido en una cubeta y sumerge tus rodillos sucios. Deja reposar durante una hora (o más si es necesario). Finalmente, usa agua jabonosa para perfeccionar el resultado, enjuaga bien y deja secar.