A menudo, las papas y las cebollas se guardan juntas en la despensa o el refrigerador, pero esto puede no ser lo mejor para su conservación. ¿Cuál es la razón detrás de esta recomendación y cuál es la mejor forma de almacenar estos vegetales? Sigue leyendo para descubrirlo.
¿Por qué no Debes Almacenar Papas y Cebollas Juntas?
El principal motivo para no almacenar papas y cebollas juntas es el etileno, un gas natural que producen las frutas y verduras al madurar. Este gas puede acelerar el proceso de maduración y deterioro de los alimentos circundantes. Aunque las papas no emiten mucho etileno, cuando comienzan a deteriorarse, pueden liberar cantidades significativas, lo que afecta negativamente a las cebollas y acorta su vida útil.

Además, las papas tienden a ser húmedas, lo que puede propiciar el crecimiento de moho en las cebollas. Por otro lado, la presencia de etileno en el ambiente de almacenamiento puede aumentar ligeramente, lo que afecta aún más la calidad y la vida útil de ambos vegetales.
Almacenamiento Adecuado para Papas y Cebollas
Para mantener las papas frescas por más tiempo, guárdalas en un lugar oscuro, fresco y seco. Evita la luz solar directa y la refrigeración, ya que esto puede alterar su sabor y textura. Una bolsa de papel o de tela en un lugar bien ventilado, como un sótano o una despensa, es ideal.

Para las cebollas, busca una malla o bolsa de papel con agujeros pequeños para una buena ventilación. Almacénalas en un lugar fresco y oscuro, lejos de fuentes de calor y de papas u otros alimentos húmedos.
Siguiendo estas recomendaciones, podrás mantener tus papas y cebollas frescas y sabrosas por más tiempo, ¡sin necesidad de almacenarlas juntas!