Las alfombras y tapetes pueden atrapar todo tipo de contaminantes que preferiríamos evitar respirar, especialmente si hay niños o mascotas correteando por la casa. Son verdaderos recolectores de polvo, por lo que es importante aspirarlos y limpiarlos regularmente. Conozcamos los métodos naturales para hacerlo.
Los limpiadores químicos para alfombras a menudo pueden ser muy dañinos, por lo que es mejor optar por soluciones naturales. Incluso si no tienes alergias, estos remedios caseros son una excelente opción. Veamos algunos:
1. Vinagre y Agua Caliente:
Mezcla una taza de vinagre con un litro de agua caliente. Esta solución puede eliminar eficazmente la mayoría de las manchas y suciedad de las fibras de la alfombra. Para potenciar su efecto, añade una cucharada de detergente líquido para platos.
Aplica la solución sobre la alfombra y frótala suavemente. Esto aflojará las manchas y eliminará por completo la suciedad. Si deseas que la alfombra quede más suave, puedes agregar media taza de suavizante de telas.
2. Agua Caliente, Detergente, Bicarbonato y Suavizante:
Esta es otra opción económica y efectiva para limpiar y suavizar la alfombra. Mezcla agua caliente con detergente, bicarbonato de sodio y suavizante de telas.
3. Sal:
La sal es uno de los métodos más naturales para limpiar alfombras. Ayuda a mantener la alfombra limpia y suave, dejando además un aroma fresco. Espolvorea sal sobre la alfombra y cepíllala bien. Deja actuar durante varias horas y luego aspira la alfombra. Quedará como nueva.
Limpiar tus alfombras de manera natural no solo es seguro para tu salud y la de tu familia, sino que también es efectivo y económico. ¡Haz brillar tus alfombras con estos simples trucos caseros!