Cultivar aguacates en casa es sencillo y asequible para todos. Empezamos con una semilla grande dentro del fruto y, con la ayuda de tutores, podemos hacer crecer un pequeño árbol que, si tenemos suerte, podrá dar frutos en el futuro. A continuación, explicamos cómo proceder.
Basta con darnos un aguacate , del que tenemos que sacar la semilla central grande. Una vez bien lavado, aplicamos tres o cuatro palos en forma de cruz, como en la foto. La idea es meterlo en el tarro sin sumergirlo del todo.
La semilla de aguacate debe colocarse en un vaso lleno de agua y colocarse en un rincón muy luminoso de la casa. Hay que esperar a que salgan las raíces, lo que suele tardar de dos a cuatro semanas (dependiendo de la luz y la temperatura). La raíz debe crecer hasta alcanzar una longitud de 10 centímetros.
Una vez alcanzada esta longitud, retira los tutores y el agua y trasplanta el aguacate a una maceta llena de tierra universal. Las primeras hojas tardarán alrededor de un mes en desarrollarse.
El aguacate debe trasplantarse al suelo en primavera. Necesita abundante agua, que se verterá cada vez que la superficie del suelo se seque. Puede añadirse un abono orgánico para optimizar los resultados.
El aguacate tarda unos 6 años en dar fruto, pero los resultados serán satisfactorios.