Se acerca el momento de encender los radiadores: el verano ha pasado y el aire más frío está regresando. Es por eso que debes preparar adecuadamente los radiadores, limpiándolos para ahorrar incluso en la factura. ¿Pero cómo hacerlo? Usa este producto y no te arrepentirás.
La limpieza de los radiadores es realmente importante, aunque a veces olvidemos ocuparnos de ello. Pero esta maniobra es fundamental, especialmente ahora que se acerca el invierno y nuestras casas necesitarán ser calentadas.
¿Sabías que existe un producto que, al usarlo, te ayudará a ahorrar incluso en los costos de la factura? ¡Descubramos juntos cuál es!
Limpiar el radiador: con solo una pulverización, ahorrarás en los costos de calefacción
¿Sabías que los radiadores deben limpiarse periódicamente? Quizás, estos complementos para el hogar a veces se olviden, pero es muy importante no dejar de hacerlo.
Si tienes dificultades y no sabes cómo limpiarlos, no te preocupes: hay varios métodos útiles para hacerlo y, además, un ingrediente que definitivamente debes marcar para hacerlo a la perfección.
Estamos hablando de nuestro querido vinagre blanco, que se puede usar en el radiador para que quede más limpio, sin polvo y, en consecuencia, más eficiente.
El vinagre debe usarse mezclado con alcohol, otro aliado del hogar, y 1 litro de agua. Mezcla los tres ingredientes en un cubo, luego usa un trapo empapado para limpiar el radiador.
Te recomiendo que limpies a fondo el aparato, para no dejar rastros de polvo, luego sécalo bien después de enjuagar.
Así, la suciedad y el polvo desaparecerán y nuestros radiadores se volverán eficientes, útiles y sobre todo consumirán menos energía y gas, lo que te hará ahorrar en la factura.
Además, este es un gesto necesario para respirar aire limpio en casa: si los radiadores estuvieran siempre llenos de polvo y ácaros, estos, con el calor emitido, se dispersarían por toda la casa.
Otros trucos para limpiar los radiadores
Existen infinitos trucos para limpiar bien los radiadores, aunque sabemos que es una práctica muy fastidiosa para algunos.
El polvo del radiador también se puede quitar con el secador de pelo: sí, el amigo de nuestro cabello puede ser útil.
Coloca un trapo húmedo detrás del radiador y otro en el suelo, luego enciende el chorro de aire frío del secador de pelo y la suciedad irá al trapo húmedo.
Luego, pasa un trapo húmedo con agua y jabón de Marsella para limpiar y luego seca con un paño de algodón, así el radiador quedará bien limpio.
Si tienes una limpiadora a vapor en casa, tal vez con una boquilla estrecha, esa puede ser otra forma perfecta de limpiar los radiadores. El vapor, de hecho, disolverá el polvo, los ácaros y las bacterias que se hayan depositado en su interior.
Si en casa tienes radiadores de hierro fundido, ten en cuenta que estos son bastante delicados y pueden rayarse fácilmente.
Para lavarlos, es ideal probar con jabón de Marsella junto con bicarbonato de sodio, dos productos muy efectivos que permiten limpiar incluso superficies delicadas como el mármol.
Mezcla el bicarbonato (una cucharada) junto con el jabón líquido de Marsella, crea una mezcla que, una vez lista, te ayudará. Toma un cubo de agua caliente y lava bien tus radiadores.
Ahora que sabes cómo limpiar tus radiadores, no te encuentres desprevenido, porque la temporada de frío llega pronto.